Desde hace años, el Sindicato Médico Andaluz denuncia la situación extremadamente preocupante de sobrecarga laboral que sufren los médicos de familia y pediatras en Andalucía, que refleja una crisis estructural por la nefasta gestión de la Atención Primaria de nuestra Comunidad. Plantillas insuficientes, elevada presión asistencial y creciente volumen de tareas administrativas generan un entorno laboral absolutamente insostenible.
Esta sobrecarga tiene consecuencias graves, bien documentadas, sobre la salud física y mental de los trabajadores. Además afecta al desarrollo profesional, pues reduce la capacidad de actualización y formación, lo que disminuye la calidad asistencial y favorece una insatisfacción laboral que da lugar al abandono de la Atención Primaria.
Es imprescindible abordar esta situación con medidas estructurales inmediatas: aumentar las plantillas, estabilizar el empleo a largo plazo, reducir la carga burocrática y adecuar la ratio de pacientes por profesional. Igualmente, medidas como el abono de los acúmulos de cupo sirven para reconocer el trabajo de los profesionales en situaciones deficitarias. Sólo con cambios de base será posible ofrecer una Atención Primaria eficiente, sostenible y centrada en las necesidades de profesionales y ciudadanos.