Llevamos asistiendo, desde hace unos meses, al igual que en años anteriores, al lanzamiento de proclamas sobre la falta de «sanitarios» o «profesionales» de la salud a nivel nacional, cuando lo que realmente faltan son MÉ-DI-COS. Y, concretamente, Médicos Especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria y Pediatras de Atención Primaria. Parece que a los políticos les cuesta pronunciar esta palabra (médicos) y no es de extrañar. Si le dijesen abiertamente a la población la situación tan alarmante que vive la Atención Primaria en España más de un ciudadano (entiéndase votante) se rebrincaría contra la ristra de políticos que ha pasado por puestos de poder. Por eso intentan ocultar la realidad detrás de otros términos confusos como «sanitarios» o «profesionales». Eso, se les da muy bien.
Asistimos hastiados a la eterna y vergonzosa lucha entre las consejerías de Salud de las distintas comunidades autónomas que reclaman anualmente al Ministerio de Sanidad que aumente las plazas de MIR porque son insuficientes para cubrir la demanda del país y a la postura del Ministerio de Sanidad que, una vez vaciado de prácticamente todas sus competencias, insta a las comunidades autónomas a incentivar la contratación de médicos fuera de nuestras fronteras como única solución. Y cuando decimos fronteras, nos referimos al marco de la Unión Europea, ya que ningún médico europeo en su sano juicio vendría a trabajar a la Atención Primaria de España y, mucho menos, a la de Andalucía.
En cuanto a la postura o «postureo» de las comunidades autónomas pidiendo más plazas MIR, ya sabemos todos en lo que terminará: España «fabricará» más médicos que terminarán emigrando a otros países más desarrollados. Y es que, todos sabemos que España, y Andalucía en particular, es incapaz de retener a profesionales altamente cualificados de la Medicina por sus pésimas condiciones laborales.
El 7 de diciembre de 2023, nuestra consejera de Salud, Dña. Catalina García, decía estas palabras en las redes sociales:
La falta endémica de profesionales a nivel nacional es el verdadero problema de la sanidad española y debe ser abordado en el seno del Consejo Interterritorial.
En la reunión de hoy, hemos pedido a la nueva ministra de @sanidadgob que tratemos este asunto de forma urgente.
— Catalina García (@LinaGarcia_AND) December 7, 2023
Y la reunión pasó sin pena ni gloria, ni debate sobre la falta de MÉ-DI-COS en Atención Primaria.
Hace tan sólo unos días, hemos podido leer en prensa una nueva nota informativa en la que la ministra Dña. Mónica García anunciaba una nueva reunión el 9 de febrero para proponer la creación de una «Comisión de Atención Primaria» como solución a todos los problemas… En fin, más enredos, más pérdida de tiempo… y más decepción. ¡Otra patadita más a la pelota y el que llegue que arree!
Señores políticos, las causas del declive de la Atención Primaria están muy claras desde hace tiempo y como muestra, les dejaré una publicación1, cuyo título traducido dice así: «¿Qué podemos aprender de los Médicos de Familia que abandonan España? Un estudio internacional de métodos mixtos».
En ella se hace un análisis detallado de las causas que motivan el abandono de España en busca de un lugar donde poder desempeñar la Medicina de Atención Primaria de un modo digno y sin sentirse explotado, mediante la recopilación de las opiniones de 158 Médicos de Familia. A continuación, exponemos las causas que se desprenden de este estudio:
Como podrán observar tanto la ministra de Sanidad como la consejera de Salud de Andalucía, la primera causa es: un salario insuficiente, y lo dicen el 75,3% de todos los que se marchan. Es decir, que no es algo puntual. Y sí, los médicos españoles somos vocacionales, pero también exigimos que se reconozca el esfuerzo realizado durante toda nuestra vida para llegar a alcanzar el nivel de conocimientos y destrezas que desempeñamos en nuestra labor. Y eso, en las relaciones empleado-empresa, se traduce en mayores remuneraciones, tal y como recoge la teoría de la Organización: «a mayor responsabilidad, mayor remuneración». Por tanto, dejen de sufragar el gasto sanitario a costa de los salarios de los médicos, elévenlos a nivel europeo (que por cierto Europa ya les ha advertido en varias ocasiones de los salarios ridículos de los médicos de España) y, probablemente, esa causa empezará a desaparecer.
En segundo y tercer lugar encontramos, empatados al 67,7%, los contratos precarios y la sobrecarga de trabajo. ¡Contratos precarios, pero si ahora es cuando más interinidades hay!, podrían alegar nuestros políticos. Pues sí, señora consejera, probablemente han batido el récord de «interinidades» de un mes de duración. Ya sabe, esos famosos contratos de «interinidad» que uno, estupefacto, firma con fecha de fin y, que antes, en el uso correcto de la lengua española, se llamaban E-VEN-TUA-LI-DA-DES.
Bueno, de sobrecarga de trabajo mejor no hablamos porque desde la firma del Pacto de limitación de Agendas de Atención Primaria su consejería no ha vuelto a tratar el tema. Simplemente, recordaremos dos cosas: cuando alguien firma un pacto tiene la obligación de velar por su cumplimiento y, nos parece, no sabemos por qué, que ni se cumple ni le preocupa… Y, en segundo lugar, nos encantaría que le explicase usted a la población, por qué los médicos no fichamos igual que otro trabajador… ¿quizás porque su consejería es consciente de que la carga de trabajo en Atención Primaria sobrepasa la capacidad de asistencia en el horario laboral o quizás porque no habría dinero para pagar las horas extraordinarias que realizamos?
Y, por último, por no alargarnos demasiado, la cuarta causa de la diáspora de médicos fuera de España es la pésima gestión de la Atención Primaria, y eso, querida consejera, creo que le toca en algo…
Pero no seamos pesimistas, este mismo estudio deja claro que el 48,7% de todos los Médicos de Familia que han tenido que emigrar estarían dispuestos a volver si las condiciones laborales se equipararan a las europeas.
Así, que no den más vueltas ni pierdan más el tiempo, las causas están aquí y son del todo conocidas y de dominio público, apliquen de una vez por todas remedios eficaces si realmente quieren que en unos años quede algún Médico de Familia en España y en Andalucía, o seguirá habiendo «falta endémica de médicos» por «falta endémica de voluntad política».
Por cierto, un último detalle: la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya avisó en los años ochenta de que a principios del s. XXI la carencia de médicos en los países desarrollados haría imposible cubrir las necesidades de la población… Suponemos que no les habrá dado tiempo a tomar medidas…
Comité Ejecutivo
Sindicato Médico de Sevilla
1 Calderón-Larrañaga, S., González-De-La-Fuente, Á., Espinosa-González, A.B. et al. What can we learn from general practitioners who left Spain? A mixed methods international study. Hum Resour Health 22, 9 (2024). https://doi.org/10.1186/s12960-023-00888-4
Enlace: https://human-resources-health.biomedcentral.com/articles/10.1186/s12960-023-00888-4