La Unidad de Psiquiatría del Hospital de la Merced (perteneciente al AGS de Osuna) viene presentando problemas de déficit de facultativos en los últimos meses por diversos motivos, y estos problemas se han agudizado en las últimas fechas. Así, a la falta de cobertura de varias bajas de larga duración de facultativos del servicio, por la no existencia de candidatos en la Bolsa de contratación del SAS para el área, se han venido a sumar una renuncia a la renovación de un nombramiento la pasada semana, así como una jubilación de otro compañero psiquiatra en unas semanas. Y, por otro lado, en la actualidad no consta nadie en el puesto de director de la unidad debido a la renuncia del último, y también se ha producido la renuncia de una coordinadora, lo cual agudiza aún más el problema.
Todos los facultativos del servicio han presentado un escrito dirigido a la Dirección Médica del centro en la que exponen que este déficit de profesionales (actual y futuro) supone “la falta de 2 psiquiatras con agenda activa de 5 en la Unidad de Salud Mental de Osuna, que a nivel hospitalario quedan tan sólo 2 facultativos (50% de la dotación), quedando 4 días en noviembre y todo el mes de diciembre con un solo facultativo para todo el hospital (hospitalización, hospital de día, urgencias e interconsultas)”.
Manifiestan también que cada vez tiene menos efectivos para cubrir las guardias y que se tienen que iniciar nuevos programas asistenciales sin facultativo referente responsable. Por todo ello, estos compañeros plantean que “queda patente la imposibilidad de garantizar una mínima y correcta atención de las necesidades asistenciales de nuestra área sanitaria”, lo que ponen en conocimiento de la dirección.
Trasladado este problema también por parte del Sindicato Médico de Sevilla a la dirección, esta alega la inexistencia ya referida de candidatos en la Bolsa del SAS. En resumen, lo de siempre: que no hay médicos para contratar (en este caso psiquiatras). Quizás lo que no haya sean condiciones que hagan atractivos los nombramientos.
Este problema, además de suponer una carga de trabajo extra, y en ocasiones inasumible, tal y como nos trasladan nuestros compañeros, supone una merma en la calidad de la asistencia a los pacientes psiquiátricos. Y todo esto teniendo en cuenta la alta demanda para las patologías de salud mental sobrevenidas en el contexto de la pandemia de la COVID-19.
Desde el Sindicato Médico planteamos al SAS la necesidad de que, de forma urgente, se den facilidades para realizar nombramientos de las categorías de facultativos deficitarias en hospitales comarcales como el de la Merced. Ya se vivió una situación similar en este hospital antes del verano con el déficit de intensivistas (ya resuelto, por otro lado).
Lo que pone todo esto de manifiesto es que, para determinadas categorías médicas, se generan déficits de profesionales que en muchas ocasiones no son puntuales, sino endémicos. Y como siempre afirmamos, no hay falta de médicos, lo que hay es falta de contratos atractivos que motivan la fuga de estos a otros sitios con mejores incentivos y condiciones de trabajo.
Por todo ello, es necesario poner en marcha medidas como el reconocimiento de los puestos de difícil cobertura, además de a nivel de Atención Primaria, en determinados centros hospitalarios. Y mejorar, en general, las condiciones laborales de los médicos de los hospitales comarcales, para hacer más atractivos estos centros para trabajar. En suma, si no hay psiquiatras en Bolsa disponibles para Osuna, hacer que sí los haya, por ejemplo, reconociendo la difícil cobertura de estos puestos.
En resumen, son necesarias medidas coyunturales para evitar problemas como el actual en este centro y en los hospitales comarcales en general. Para ello es necesario que el SAS apueste por estos centros que atienden a poblaciones alejadas de las grandes capitales. Y que lo haga de verdad. Tanto por nuestros compañeros como por los pacientes.